El sonido armónico y cálido, característico de AUGUST FÖRSTER, así como el despliegue tonal voluminoso de nuestros instrumentos son fruto de una vasta experiencia, adquirida durante un proceso de mejora constante de más de 160 años. Un logro que merece una mención particular es nuestra tabla armónica, elaborada con sumo esmero y de manera exclusiva al estilo FÖRSTER. Las sólidas placas de hierro fundido de los instrumentos de AUGUST FÖRSTER soportan sin problemas la tracción de las cuerdas, que puede llegar a ser de hasta 20 toneladas. Aunque su forma especial (basada en una patente de August Förster del año 1866) garantiza en gran medida la resistencia al alabeo, nosotros incorporamos además unos barrajes sólidos. Estos no solo constituyen una estructura de madera resistente, sino que también conservan la afinación, una característica inconfundible de nuestros instrumentos.